Propuesta para la transición energética:
Qué sucede tras la salida de Luma y Genera
No se trata solo de cancelar contratos o manejar deudas, sino de reconstruir nuestro sistema eléctrico de una manera que sirva al interés público, promueva la energía renovable y asegure que nunca más un servicio esencial esté a merced de intereses privados. Esta propuesta traza el camino para un futuro energético que le devuelva a Puerto Rico lo que nunca debió perder: el control de su propia energía.
Hacia un futuro energético en las manos de Puerto Rico
Energía
¿Cómo Juan Dalmau Planea Rescatar el Sistema Eléctrico de Puerto Rico?
¿Cómo es una agencia despolitizada que sirva al interés público? El Dr. Rolando Emmanuelli
Luz al Final del Túnel: Presente, Pasado y Futuro de Nuestro Sistema Energético
Cómo devolvemos a Puerto Rico el control sobre un servicio crítico: la energía eléctrica
Bajo el liderazgo de nuestro candidato a la gobernación, Juan Dalmau Ramírez, Puerto Rico tomará un nuevo rumbo hacia un futuro energético sostenible, eficiente y, sobre todo, público. Esta propuesta busca, no solo corregir los errores del pasado, sino también establecer un nuevo modelo que garantice la gobernanza autónoma, profesional, despolitizada y democrática del sistema eléctrico de la isla.
PRIMER COMPONENTE:
Cancelación de los contratos con LUMA Energy y Genera PR
Desde el primer día de su gobernación, Juan Dalmau emitirá una orden ejecutiva que establecerá la política pública del gobierno de Puerto Rico para la salida de las compañías privatizadoras LUMA Energy y Genera PR. Esta política estará basada en tres principios fundamentales:
1. Fiscalización inmediata: La Autoridad de las Alianzas Público-Privadas (AAPP) designará un equipo de expertos que documentará y notificará a las privatizadoras sus incumplimientos desde el inicio de sus operaciones, activando las cláusulas contractuales que permiten su salida por razón de las múltiples violaciones contractuales. Esto permitirá que se pueda decretar eventualmente la cancelación de los contratos.
2. Negociación para una transición ordenada: Se convocará a los directivos de LUMA y Genera PR para negociar una salida ordenada en un plazo no mayor a seis meses. Si no se llega a un acuerdo, una vez se cumplan los términos establecidos en los contratos, el gobierno procederá con la cancelación con causa de los contratos por incumplimiento, conforme a los términos legales vigentes. Simultáneamente, se presentará una acción judicial de nulidad de contrato para que se determine que los contratos son contrarios al orden público y por tanto, nulos.
3. Nombramiento de una nueva gerencia pública: Se establecerá un equipo de gestión transicional compuesto por personal capacitado de la AEE y la gerencia de LUMA para activar el proceso de transición que establece el contrato para devolver las operaciones a la AEE. Esto, asegurando la continuidad del servicio mientras se restablece mediante acción legislativa un modelo público con mejor gobernanza.
SEGUNDO COMPONENTE:
Voluntad política para un modelo público reformulado
El compromiso de la Alianza es claro: poner fin a los desastres de las privatizaciones en el sector eléctrico. Bajo un modelo público reformado, la nueva AEE será una entidad autónoma, profesional y despolitizada, con una Junta de Gobierno formada por expertos de diversos sectores, seleccionados por su competencia y no por sus afiliaciones políticas. Este proceso incluirá la enmienda a la Ley 83 para asegurar que la AEE sea una entidad verdaderamente democrática y al servicio de los intereses del pueblo.
El gobernador Dalmau nombrará únicamente a un miembro en la Junta de Gobierno, respetando la independencia de la entidad. Además, se aprobará una ley que prohíba expresamente las actividades de recaudación y proselitismo político dentro de la AEE.
TERCER COMPONENTE:
Manejo de la deuda de la AEE
El manejo de la deuda de la AEE ha sido uno de los principales errores de la Junta de Control Fiscal (JCF), que ha ignorado las prioridades establecidas en el acuerdo de fideicomiso (Trust Agreement) de la AEE. La administración de Juan Dalmau Ramírez garantizará que el plan de ajuste de la deuda respete el orden de prioridades, comenzando por asegurar el pago de las operaciones de la AEE, las pensiones de los retirados y las obligaciones laborales, de
mantenimiento y de reconstrucción. Solo después de cubrir estas necesidades esenciales se pagará a los bonistas, y si no existen fondos sobrantes, no se realizarán pagos adicionales a los acreedores. Este enfoque, basado en la justicia y la racionalidad financiera bajo el derecho de quiebras, es la única forma de equilibrar las responsabilidades fiscales de la AEE con las necesidades críticas de su operación.
CUARTO COMPONENTE:
Adopción de la propuesta de la organización Queremos Sol
Adopción de la propuesta de la organización Queremos Sol, para encaminar el desarrollo planificado, sostenible y racional del futuro energético del país, basado en las aportaciones científicas y técnicas de la comunidad de expertos y expertas que han colaborado durante años con esa organización.
ASPECTOS ESPECÍFICOS DE LA PROPUESTA PARA LA TRANSICIÓN ENERGETICA, TRAS LA SALIDA DE LUMA Y GENERA ALIANZA PIP Y MVC
Darle un mandato a nuestra corporación pública, la AEE con una nueva misión: re electrificar nuestro archipiélago, con justicia energética, y usando tecnología sostenible y resiliente que utilice al máximo nuestros recursos energéticos endógenos. Nuestra corporación pública, la AEE, no puede estar intervenida por los partidos políticos. Necesita una Junta de Gobierno donde el Gobernador no pueda hacer y deshacer.
La transformación de un sistema eléctrico que comenzó su deterioro a principios de la década de 1990 (es decir, al menos 30 años de deterioro) no se logra en meses, ni en 2 años. Este es el primer gran reto de cualquier propuesta de reforma. No se trata de un acto de magia, sino de un proceso que exige gran responsabilidad.
La estructura de gobernanza es de gran importancia y, además, en este momento nuestro pueblo demanda acción. Proponemos un plan de evaluación, estabilización y transición del servicio de electricidad. Los componentes de planificación y de operación necesitan atenderse con urgencia.
Apoyamos totalmente la propuesta de gobernanza de Queremos Sol, la cual constituye el comienzo para depurar el modelo de gobernanza.
El componente de operación requiere de una evaluación rigurosa del estado físico del sistema, lo que se traduce en una salida ordenada de LUMA y una transición planificada a trabajo por regiones. Nombrar un(a) Director(a) Ejecutivo(a) que de inmediato nombre ingenieros/as de distrito, cada uno con al menos 2 ayudantes competentes, para evaluar:
líneas de distribución (estructuras, conductores, aisladores) y subestaciones, necesidad de poda, estado del sistema de comunicaciones, sistema de protección y transformadores de distribución.
Lo anterior requiere formular planes por distrito. Esto incluye estimados de costo y presupuesto, para decidir dónde gastar el dinero y qué se hace en la corporación pública, dónde pueden dar la mano los alcaldes, y qué tareas habría que contratar para la estabilización y restauración del sistema. Esa misma visión, con los mismos objetivos, hay que ejecutarlo en el caso de la generación eléctrica.
También será necesario decidir cuáles unidades se repararán, a sabiendas que luego se retirarán, y cuáles hay que retirarlas ya.
Una gran ironía es la siguiente: hasta la fecha no se ha destacado personal especializado en someter y procesar los proyectos que van a pagarse con fondos de FEMA. Ese es uno de los grandes males de LUMA.
El componente de planificación es muy importante y hay que reconciliarlo con el plan integrado de recursos que existe y con su revisión. El problema de fondo es que el Negociado de Energía, LUMA y Genera siguen apostando por contratistas expertos en sistemas de potencia eléctrica del siglo XX. Se niegan a contratar peritos con una visión de un sistema del siglo XXI.
Esto trae otro elemento que no se discute: hace falta reentrenar a los profesionales de la ingeniería y a técnicos para que puedan diseñar, construir y operar una nueva red eléctrica.
Por lo tanto, urge planificar una nueva red eléctrica reforzando la distribución, para que podamos tener vehículos eléctricos, microrredes, plantas virtuales y
todas las demás tecnologías que deseamos tener en este siglo.
La planificación debe tener como prioridad la generación renovable distribuida (techos y
estacionamientos para el sol) y el almacenamiento distribuido. Hace falta diseñar programas para incentivar el uso del almacenamiento distribuido en los hogares. Programas similares se están implementando en Hawaii)
Se requiere almacenamiento distribuido en la red de distribución (en las subestaciones) y en manos del operador de red, es decir, de la AEE. Estudios preliminares (doctor Armando Figueroa) muestran que hacen falta unos 1,200 MW de almacenamiento (400 subestaciones cada una con 3 MW de 4 horas de duración) para alcanzar la misma confiabilidad que se
supone ofrecen los 565 MW quemando metano que propone Genera para estabilizar la generación.
Los 1,200 MW servirán para muchos propósitos y no solo para disminuir las interrupciones por falta de generación. Sirven también para integrar más y más renovables, para suministrar reserva en rotación y para controlar frecuencia (esto a su vez disminuye el uso del gas).
¡Otra agencia pública creará un plan de reciclaje de baterías, electrónica y paneles solares de inmediato!
Urge cerrar el debate de la generación descentralizada, estableciendo la masificación de
sistemas solares fotovoltaicos en los techos como el eje central de la transición energética boricua hacia energía resiliente y limpia. Sin esta visión, no es posible hacerle justicia a cientos de miles de familias que estuvieron muchos meses sin servicio de electricidad de la red.
Luma no es responsable de la implementación de esta visión, pero está a cargo del proceso del PIR (Plan Integrado de Recursos) y, aparte de aprobar los sistemas en medición neta como les obliga las regulaciones, no aporta a esa visión. Al contrario, se queja de los problemas que resultan de integrar más generación distribuida a la red.